martes, 5 de abril de 2011

071 La magia del movimiento

Hay días en los que especialmente se notan más los movimientos del bebé. Es sorprendente sentir esa vida que se está gestando, de la que somos partícipes y con la que poco a poco vamos creando ese vínculo de unión.
Con el fonendoscopio hemos podido oír sus latidos y movimientos, alimentando también esas ilusiones de paternidad. Es increíble ver cómo responde a nuestro movimiento, caricias o presión del fonendoscopio, no sólo se nota con el tacto, sino que también podemos apreciar sus movimientos a simple vista. Por el momento, preferimos que sea una niña activa. Más adelante ya veremos. Eso sí, a ambos nos gustan los niños, aunque siempre hemos interactuado con niños un tanto mayores o autónomos. Ahora pronto tendremos que aprender a tratar con bebés y además, este será "carne de nuestra carne".

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar
  2. Este es un comentario de prueba para administrar y censurar posibles comentarios de personas que no tienen nada mejor que hacer que dejar comentarios anonimos fruto de su pobre lucidez intelectual, aliñada con dosis de ignorancia, incultura y faltas de ortografía

    ResponderEliminar